The United Nations Office for Project Services (UNOPS)

La paridad de género es necesaria cuando se trabaja en lugares desafiantes

Los proyectos de ayuda humanitaria y desarrollo a menudo tienen lugar en entornos difíciles. Para implementarlos, no se puede ignorar la necesidad de una mano de obra diversa y con representación equilibrada de género. A continuación, se explica por qué.

Las personas que trabajan en el ámbito del desarrollo internacional deben ser representativas de las personas a las que ayudan. En demasiados lugares, este no es el caso, especialmente en lo que concierne a las mujeres.

UNOPS implementa proyectos en todo el mundo, incluidos aquellos lugares en los que nuestros equipos de proyectos tienen una representación por género desigual. En los países afectados por conflictos, en particular, las mujeres están subrepresentadas.

Necesitamos la mejor y más brillante mano de obra, de todos los géneros, para llevar a cabo nuestro trabajo.

Entonces, ¿cómo podemos mejorar el equilibrio de género de los proyectos en lugares que históricamente han tenido muy pocas mujeres, o ninguna, trabajando sobre el terreno? La solución empieza por alentar activamente a las mujeres más cualificadas a solicitar puestos en estos lugares.

Las actividades de divulgación pueden ser una forma muy efectiva de llegar a más mujeres interesadas en hacer carrera en los sectores humanitario y de desarrollo. Dirigirse a diferentes grupos de contactos profesionales puede ayudar a aumentar el número de solicitantes. En Nepal, por ejemplo, contamos con una red de mujeres que pone en contacto a las personas encargadas de la contratación en UNOPS con mujeres que trabajan en la industria de la construcción, lo que resulta especialmente importante dados nuestra especialización en la implementación de infraestructura.  

No obstante, para que la paridad de género se convierta en una realidad en cualquier organización, también debe haber opciones viables para equilibrar la vida profesional y personal. Deben existir oportunidades que realmente permitan compaginar el trabajo y la vida personal, tanto para las mujeres como para los hombres.

Es importante adaptarse a los compromisos particulares que el personal tiene fuera del trabajo. La oficina de UNOPS en Afganistán, por ejemplo, cuenta con una guardería y la oficina en Kenya tiene una sala de lactancia. Y todo el personal de UNOPS, independientemente de su tipo de contrato, puede solicitar opciones de trabajo flexibles. 

Si una organización puede confiar en su personal para administrar millones de dólares, debería ser capaz de confiar en ese mismo personal para organizar su propio plan de trabajo de acuerdo a sus necesidades».

Tina Friis Hansen - Directora del Grupo de Personas y Cambio

También tomamos medidas concretas para contratar a más mujeres en puestos de alto nivel. Si menos del 20% de las personas que solicitan puestos de nivel superior son mujeres, la persona que dirige las contrataciones debe indicar las medidas tomadas inicialmente para llegar a las mujeres solicitantes y promover sus candidaturas. Sin una justificación bien fundamentada, el plazo para solicitar la vacante debe ampliarse o reabrirse.

Para garantizar que en el texto del anuncio de la vacante no haya perjuicios inconscientes que impidan a las mujeres cualificadas postularse o superar el proceso de selección, los requisitos del puesto también se vuelven a examinar. Además, las mujeres deben representar al menos el 50% de las personas preseleccionadas para una vacante de nivel superior.

Estas iniciativas están empezando a dar frutos. Aunque todavía no hemos logrado la paridad de género como organización, estamos progresando: el porcentaje de mujeres en UNOPS ha aumentado al 39%. Y para 2020, nuestro objetivo es lograr la plena paridad de género a nivel mundial.

¿Por qué esta es importante? Porque es realmente fundamental para el fortalecimiento, la sostenibilidad y el éxito a largo plazo de la organización, de los proyectos que implementamos y, lo más importante, de las personas a las que ayudamos. También fomentará una perspectiva de género para la implementación de proyectos y, en última instancia, contribuirá a lograr mejores soluciones para nuestros asociados.

En mi experiencia, es más probable que las mujeres compartan sus intereses y experiencias vividas con otras mujeres. En Oriente Medio, por ejemplo, un proyecto de reconstrucción de viviendas de UNOPS dirigido a los grupos más vulnerables utilizó equipos con representación equilibrada de género para ampliar su alcance y llegar a hogares encabezados por una mujer.  El hecho de que las mujeres no estén adecuadamente representadas en nuestros equipos de proyectos dificulta nuestra capacidad para satisfacer las necesidades de todas las personas a las que ayudamos.

La paridad en los equipos de proyectos ofrece beneficios que se extienden más allá de cualquier organización en particular. Además, puede ayudar a proporcionar oportunidades socioeconómicas a largo plazo para personas, comunidades locales y países por igual.

Ver a mujeres altamente cualificadas trabajar en una gran variedad de empleos en proyectos implementados por UNOPS en sus comunidades locales también puede inspirar a otras mujeres y niñas a hacer carrera en ámbitos tradicionalmente dominados por hombres. 

Las mujeres aportan sus propias perspectivas únicas. La incorporación de esas perspectivas ayuda a garantizar que se tengan en cuenta las necesidades de todas las personas y que se satisfagan mejor las necesidades de aquellas a las que ayudamos.


Descubrir más