Junto con asociados nacionales y organizaciones de la sociedad civil, ONU-Mujeres y UNOPS rehabilitarán cuatro refugios y les proporcionarán apoyo técnico y financiero durante los próximos tres años. UNOPS estará a cargo de la rehabilitación y el reequipamiento de los refugios para garantizar que tomen en cuenta las consideraciones de género, sean más inclusivos y libres de discriminación, con el objetivo de contribuir a que presten servicios de alta calidad a las mujeres y las niñas.

El proyecto tiene el objetivo de elevar el nivel de coordinación entre los refugios y mejorar sus capacidades institucionales, organizacionales y técnicas. Esto ayudará a garantizar que los distintos servicios que prestan los refugios a las supervivientes de violencia sean eficaces, accesibles y respalden la reinserción de las mujeres vulnerables a la sociedad.

«Nuestro objetivo conjunto es que las mujeres y niñas palestinas tengan acceso a una amplia variedad de servicios que las proteja y apoye durante el proceso de reinserción a la sociedad», explicó Maryse Guimond, Representante Especial de ONU-Mujeres en Palestina.

«Para lograrlo, trabajaremos con partes interesadas del lugar a fin de aumentar la calidad y la accesibilidad de estos servicios, mejorando la capacidad, las actitudes y el comportamiento de quienes proporcionen dicho respaldo», agregó.

El proyecto forma parte del programa conjunto HAYA, financiado por el Gobierno de Canadá e implementado por ONU-Mujeres, el Fondo de Población de las Naciones Unidas, ONU-Hábitat y la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito. El programa HAYA reúne a autoridades palestinas, organismos de las Naciones Unidas, organizaciones de la sociedad civil, organizaciones comunitarias y otros asociados con el objetivo de reducir la vulnerabilidad de las mujeres y las niñas a todas las formas de violencia y protegerlas del riesgo de sufrirlas.